Panistas coinciden en que los videos que exhiben supuestos actos de corrupción de colaboradores cercanos del gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, y del exsenador Jorge Luis Lavalle son una estrategia de la cuatroté para debilitar a Acción Nacional rumbo a las elecciones, y aunque nadie mete las manos al fuego por sus compañeros, aseguran que es mejor esperar una investigación. Sin embargo, Ernesto Ruffo Appel, quien fuera el primer gobernador del PAN, dijo que los videos dejan claro que durante el sexenio calderonista llegaron arribistas y corruptos alejados de la doctrina y de los valores albicelestes.

Ruffo Appel fue senador junto con Ernesto Cordero, entonces coordinador de la bancada panista, Francisco Domínguez, Jorge Luis Lavalle, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, a quienes acusó de negociar los votos del blanquiazul en el escritorio del líder parlamentario del PRI en esa época, Emilio Gamboa. “Varios de los que hoy están bajo investigación o bajo sospecha, como son: Roberto Gil Zuarth, Cordero, Domínguez, Cabeza de Vaca, Lavalle… cuando algunos de ellos renunciaron al PAN, yo mismo expresé que me sentía aliviado porque se había salido la pus de algo que yo veía como un absceso”.

Otras voces históricas como Elena Álvarez Bernal de Villavicencio y Cecilia Romero consideraron que es necesario esperar una investigación, porque el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador tiene como eje desprestigiar al partido de cara a la elección.

El dirigente nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, quien forma parte también de esta nueva generación de panistas, dijo que los videos son “puro cuento” y no lastiman la imagen del partido. “Hoy el PAN está cohesionado ante la amenaza del debilitamiento institucional”, dijo.

Cortés Mendoza anticipó que si existe algún responsable acreditado en hechos de corrupción será expulsado del partido. “Hasta hoy todo ha sido un uso abusivo y dirigido de la justicia para dañar a la oposición, quien es quien puede ganarle a Morena, para ocultar las miles de muertes por el pésimo manejo de la pandemia y para ocultar la brutal caída en la economía ha dejado en el desempleo a millones de mexicanos y nosotros”, consideró.

Además, legisladores de este partido presentaron una denuncia ante la FGR contra quien resulte responsable por la difusión de esas imágenes. En este contexto, el exdirigente del PAN, Manuel Espino Barrientos, quien salió de este partido por confrontarse públicamente con Felipe Calderón Hinojosa, afirmó que en ese instituto político hay una “evidente corrupción, permitida y solapada por Calderón y sus ladrones”. El actual Comisionado del Servicio de Protección Federal en el Gobierno de López Obrador afirmó que esa perversión “clama justicia, caiga quien caiga”.

En entrevista con este diario, recomendó a los panistas reconocer errores y “pedirle perdón a los mexicanos por haberse convertido en un refugio de corruptos y regresar al camino de la responsabilidad cívica con honestidad y eficacia”.

El exdirector de Pemex también habría declarado ante el MP que los ex legisladores Ernesto Cordero, Ricardo Anaya y el hoy gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, habrían recibido un beneficio económico por sacar adelante la reforma energética del sexenio pasado.

OEM-Informex buscó a Cordero, Anaya y Lavalle, pero no hubo respuesta. Desde su Twitter, Cordero se deslindó de las acusaciones. El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa rechazó haber pedido dinero y ayuda para que su hermano ocupara un puesto más alto en Pemex.

Con información de Gabriel Xantomila | El Sol de México y Martha Cuaya/ El Sol de Puebla, Julio Astillero.